domingo, 11 de septiembre de 2011

Mirando en la distancia



La gente dice que soy valiente… otros me preguntan sino extraño mi país... la verdad extraño todo, mis padres, mis hermanos, mis sobrinas, mis amigos… hasta a mis ex jefes los extraño, pero no cambiaría la decisión de venirme.

Estos días he sentido una especie de “bajon” de Maracaibo… quizás fue el cumpleaños de la ciudad o el escuchar algunas gaitas, pero de pronto me dieron ganas de tomarme una frescolita bien fría, comerme unos tequeños o unas mandocas calientitas…. Sentarme con mis padres a conversar en el taller de la casa o visitar a mis amigos y tomarnos unas poquitas “pa´la calor”

Y desde aquí me pongo a pensar en Maracaibo, en el calor, en la gente… En esa ciudad caóticamente hermosa…  Y es que en la distancia ese caos que muchas veces parece invivible es lo que hoy extraño.
Pero también soy consciente que en mi visión de la ciudad la distancia resalta las cosas positivas y va diluyendo entre los kilómetros las cosas negativas… Es increíble cómo cambia el panorama cuando lo miras desde afuera.

El estar aquí me ha hecho ser agradecida por las cosas que puedo disfrutar, me encanta el paisaje y vivo en un sector particularmente hermoso… pero también me ha hecho ver Maracaibo con otros ojos… quizás ojos un poco críticos… pero sin duda reales.

Maracaibo es una ciudad hermosa, pero soy consciente de que es tan difícil hoy en día vivir allá… Se que no es bueno hacer comparaciones… pero también se que es inevitable… y mientras paseo por las calles de Santiago me pregunto cómo es posible que ningún político (ni de antes ni de ahora) se preocupe porque los marabinos tengamos un transporte público que sea digno, o que tengamos calles asfaltadas, no hay preocupación real por la seguridad de quienes allí viven y todo se resume en un discurso político que esta vacio de intenciones y lleno de promesas… Como decía Di Martino en una de sus propagandas políticas “Mientras haya esperanza” y así está la mayoría… viviendo de esperanzas… haciendo lo que se puede para salir adelante, intentando sobrevivir.

Estoy aquí y estoy consciente que las cosas tampoco son perfectas… pero no conozco a nadie que me diga que son peores… y desde mi perspectiva puedo decir que al menos como experiencia personal, la oportunidad de conocer otra ciudad, de aprender a moverse en ella, de intentar camuflarse entre todos… es algo que me deja una gran satisfacción a nivel personal y un gran aprendizaje.

Pero saben que me gustaría con todo el alma? Que Maracaibo fuera en la realidad tan hermosa como es en mis recuerdos y en las gaitas…

jueves, 8 de septiembre de 2011

Trámites "en menos de una hora"



Una vez que llegué a Chile tenía claro cual sería el proceso para legalizar mi permanencia en el país… lo que no estaba tan claro era el tiempo que eso demoraría y me preocupaban los inconvenientes que podrían presentarse.

Me vine enamorada de un Chileno maravilloso y fue El quien me propuso que con un contrato de trabajo (de una empresa suya) iniciáramos los trámites para solicitar una visa de residencia sujeta a contrato. 

La página de extranjería fue de mucha ayuda… y en base a los requisitos que allí publicaron (y que dejo para ustedes en este blog) redactamos un contrato de trabajo con apoyo de algunos modelos que conseguimos en la web. Y a dos meses de estar en Santiago fuimos juntos a la notaría a legalizar mi primer contrato de trabajo en Chile y con eso dar el primer paso de varios.

Una vez con el contrato de trabajo era sencillo reunir los requisitos adicionales y posteriormente hacer el envío de la correspondencia como se indica… El tiempo de espera para obtener respuestas es algo variable, en mi caso pasaron alrededor de 3 semanas hasta que recibí la comunicación que certificaba que mi solicitud de visa sujeta a contrato se encontraba en trámite y adjunto a dicha carta estaba una planilla con el monto a pagar para los derechos del permiso temporal de trabajo que había marcado al llenar la solicitud.

EL proceso fue sencillo.. Fotocopiar la planilla de pago (antes de ir al banco).. Realizar el pago e ir al departamento de extranjería a retirar el permiso temporal de trabajo.
En extranjería todo parece ser un poco caótico, pero la verdad es que a pesar de la cantidad de personas que hay en el lugar la atención fue bastante rápida y a pesar de las 30 personas que habían delante de mi, el proceso en total no demoró mas de una hora.

Un mes después encontré debajo de mi puerta el sobre con la respuesta a la solicitud de mi visa… APROBADA… Y adjunto a ella la planilla para el pago de la misma. De eso hace poco mas de una semana. Ayer decidí ir al banco y posteriormente a Extranjería.. De nuevo, espera de una hora que resulto sorpresiva ante la cantidad de personas en el lugar… Y es que en Venezuela el solo ir al banco es algo que generalmente toma toda la mañana o la tarde, asi que me confieso nueva en esto de los trámites que logran realizarse con rápidez… Me confieso admiradora de funcionarios que hacen su trabajo sin parar, sin detenerse a echar cuentos con el compañero, de esos que respeta al visitante y que satisface sus necesidades de atención y asesoría… 

Al salir de extranjería ya tenia mi visa estampada en el pasaporte  válida exactamente por un año y también me habían informado que tenía 30 días contados para realizar la solicitud de la Cédula como Extranjera. 

Para este proceso es necesario ir a la Policia Internacional y registrar el estampado de la visa, imagino que es una forma de controlar a los extranjeros y sus antecedentes… De nuevo la agradable sorpresa de no tener que esperar más de una hora (con la cantidad de gente que había allí dentro) y de allí a la oficina del Registro Civil de la Comuna donde vivo a solicitar formalmente mi cédula de identidad.

Si algo me ha sobrado es la luz de Dios en este camino… La oficina del Registro Civil queda a solo dos cuadras de mi casa, asi que con tranquilidad me dispuse a finalizar los trámites.
Al llegar al Registro Civil fue la sorpresa desagradable… “No hay sistema” y les juro que sentí una especie de Dejavù y me creí en Venezuela en esas esperas interminables de los bancos, los registros, las notarias, los ministerios y hasta las prefecturas… 

Sin embargo otra vez la luz de Dios… y aunque estaban sin sistema desde las 10am (eran la 12.40pm cuando llegué) 20 minutos después “Llegó el sistema”!!! la mayoría de las personas se había retirado cansada de esperar y resultó que de nuevo “en menos de una hora” me estaban atendiendo… 

Gracias al blog de otra Venezolana en chile (El Baúl de Mary) pude llegar al registro con todos los requisitos, ya que si bien en la PDI (Policia de Investigaciones) te dicen que solo necesitaras el pasaporte y la planilla de registro para ir a solicitar la Cedula, la verdad es que en el registro te piden copia del pasaporte donde sale tu identificación y donde sale tu visa estampada, además de copia de la planilla de registro ante la PDI.
A este punto ya no me extrañaba la buena atención, la crema en las manos una vez que te toman las huellas y las toallas de papel para que generosamente te limpies (no te dan solo una toallita de papel.. te dan varias jejejeje)… Salí del Registro antes de las 2pm, con mi comprobante y sonriente porque increíblemente había realizado los trámites de forma rápida y sin ningún inconveniente… 

Así que trámites realizados ya puedo decir que existo.. que formo parte de la población extranjera que legalmente reside en Chile… que alcé el vuelo desde mi Maracaibo querida y que quizás hoy ya estoy encontrando otro nido.